lunes, 26 de noviembre de 2012

Normas básicas para acertar en el diseño de un jardín


Diseño de jardines
Son muchos los elementos que hay que considerar a la hora de decidir el diseño de un jardín pero, sin duda, también es una enorme ventaja poder partir desde cero y planificar el exterior de nuestra vivienda a la medida exacta de nuestros gustos y necesidades. Es muy recomendable contar con el asesoramiento de algún experto, para conocer todos los secretos que influyen en el diseño de un jardín.

Lo primero que tendremos que estudiar para iniciar el diseño de un jardín es todo el entorno que le rodea. Es importante que haya un equilibrio entre el estilo de nuestra vivienda y el tipo de jardín que elegimos. Por ejemplo, si el edificio es de líneas minimalistas, debemos olvidarnos de los jardines barrocos. Quizá en este caso sería perfecto inclinarnos por un sencillo jardín japonés.

La importancia del suelo de los jardines para su desarrollo


Los franceses, con una de las culturas más íntimamente ligada a la jardinería, definen a los jardines como aquellos espacios dedicados al cuidado de diferentes especies vegetales con única finalidad de que sirvan para el disfrute de su contemplación.

Suelo del Jardín
Esta idea nos sirve de punto de partida para enfatizar la importancia que ciertos trabajos de jardinería tienen para que estos lugares luzcan su mejor aspecto.

Uno de los elementos que más influye en el enraizamiento y posterior evolución de cualquier especie de planta es el terreno en el que se ubican, el suelo del jardín. Aunque es cierto que hay ejemplares adaptados a cualquier calidad de sustrato, también lo es que los jardines implantados sobre suelos arcillosos son los que más problemas tienen para salir adelante.

Cómo disfrutar de un verdadero jardín zen


Jardín Zen
El verdadero rasgo diferencial entre un jardín zen y cualquier otro tipo de jardines es que los jardines japoneses están ideados para la meditación y la relajación. Esto quiere decir que en su diseño no solo se atiende al aspecto estético, sin duda también importante, sino que hay que combinar una serie de elementos para encontrar un equilibrio y una armonía que se transmita a quienes lo contemplen y disfruten.

En su país de origen, un jardín zen es algo tan esencial que todo el mundo cuenta con uno, que, además, puede diseñar cada persona a la medida de sus gustos y necesidades. Porque este tipo de jardines en su concepto más amplio, se pueden montar en un mínimo espacio de dos metros cuadrados y ubicarse en el interior de una vivienda.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Elige flores de temporada para tu boda


Ramo de novia
Da igual el mes del año que hayas elegido para la celebración de tu boda, las flores son el complemento indispensable en la decoración de ambiente, como accesorios de los novios y otros invitados y, por supuesto, en el tradicional ramo de novia. Pues aprovechar las flores de temporada para tu boda, porque las opciones son tantas que, seguro encuentras las que mejor se adaptan a tu estilo.

Para empezar, hay un grupo de flores de temporada que están fácilmente disponibles durante todo el año. Además, se trata de ejemplares que de gran belleza y que son del gusto de mucha gente. Hablamos de las rosas, en todas sus modalidades de color y variantes, las orquídeas, los geranios, lirios y gran parte de las llamadas flores tropicales.

Pero, si quieres salirte un poco de las tendencias más clásicas, te sugerimos algunos tipos de flores de temporada para boda durante los meses de invierno. Aunque te parezca que no es la mejor época del año para que florezcan, existen bastantes variedades que se encuentran en todo su esplendor, como las margaritas, los gladiolos y tulipanes, o gardenias y gerberas, por ejemplo.

Si necesitas flores de temporada para casarte en el período de primavera/verano, además de riqueza de tonalidades, vas a disfrutar de todo un menú de aromas con lilas y narcisos, más propios de la primavera, o girasoles y margaritas, espectaculares en verano. Para el otoño puedes contar con las caléndulas y las dalias, y todo un abanico de frutos del bosque que complementen la decoración de tu boda.

Monta un sorprendente huerto con flores comestibles


flores comestibles
Los tiempos en los que organizarte un pequeño huerto, para consumo propio de tomates, pimientos u otras especies de hortalizas, era el planteamiento de quien disponía de un poco de terreno o  una terraza. En este momento, lo más innovador es cultivar tus propias flores comestibles para enriquecer todos tus platos.

Las flores comestibles se han usado en la gastronomía de las civilizaciones más antiguas y en todas las épocas. Griegos y romanos, hindúes o chinos, en el gran imperio de Carlo Magno o en las cortes de los siglos XVI y XVII, en todas estas mesas se contaba con el colorido y el sabor de diferentes ejemplares de flores comestibles.

Pero, incluso la cocina más modesta cuenta con recetas de brócoli, coliflor, alcachofa o un toque de azafrán, todas ellas modalidades distintas de flores comestibles. Aparte  de las saludables aportaciones nutricionales de muchas de ellas, lo que es indiscutible es que proporcionan un aroma y colorido muy especial a cualquier plato.

Sin embargo, hay que tener cuidado porque no todas las plantas cuentan con flores comestibles. De hecho hay algunas que pueden resultar verdaderamente tóxicas, además de los productos químicos que pueden llevar incorporados en forma de pesticidas y otros tratamientos que se les hayan aplicado.

Por eso, si queremos degustar en nuestros platos de el toque especial que proporcionan amapolas, begonias, caléndulas, capuchinas, claveles, crisantemos o gladiolos, por solo citar algunos de los muchos tipos de flores comestibles que existen, lo mejor es cultivarlas nosotros mismos, así disfrutamos de su belleza y sabor sin peligro.


Cómo elegir nuestras plantas para disfrutar de flores de temporada


Las plantas de temporada son aquellas que adquirimos justo cuando están iniciando su periodo de floración que, dependiendo de las espacies será al inicio de la estación cálida o cuando van a empezar los primeros fríos. Solo siguiendo unos consejos esenciales conseguiremos disfrutar de las flores de temporada en todo su esplendor.

Da igual si nuestras flores de temporada son ejemplares de primavera/verano o, por el contrario, su estación de desarrollo es el otoño/invierno, en ambos casos estas plantas habrán crecido en un entorno ideal de temperatura y humedad estable, como es propio de un invernadero, por lo que su trasplante a un espacio diferente va a suponerle un trauma. Por eso, tienes que extremar los cuidados de tus flores de temporada al máximo, intentando que el proceso de acondicionamiento sea progresivo.

Antes, debes haberte asegurado de comprar ejemplares de flores de temporada que presenten capullos aún sin abrir, en lugar de las plantas que tienen ya todas sus flores. Es la única forma de que sea en tu jardín o terraza donde se despliegue su colorido en su máxima medida.

Cuando vayas a cambiar las plantas de maceta o ponerlas en tu jardín, procura no manipular mucho las raíces de tus flores, al ser piezas que no van a sobrevivir más de una temporada no necesitan un enraizamiento profundo, más bien prefieren que no se toque el cepellón y se coloquen sobre tierra suelta, sin maniobras de prensamiento. Deja tus flores de temporada cubiertas de un par de centímetros de tierra, con un poco de abono rico en potasio.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Los productos de jardinería esenciales para cuidar nuestras plantas


La jardinería es cada día más una opción como actividad para el tiempo libre por diversas causas: se adapta a todos los espacios y climas, no requiere de grandes conocimientos en los inicios o la primera inversión en productos de jardinería no tiene porqué ser muy costosa. Si se dispone de un espacio exterior en la vivienda es un poco más complicado el arranque de nuestro trabajo de jardinería, pero siempre podemos empezar por el cuidado de plantas en macetas, mucho más sencillo para principiantes.

Para comenzar nuestra labor de jardinería, además de la elección de los ejemplares de plantas y los recipientes en los que los instalaremos en caso de necesitarlos, debemos hacernos con sustrato para plantación. Lo más conveniente es que tengamos la variante universal, válida para la mayor parte de especies, pero no está de más que tengamos tierra especial para las especies más delicadas. Otros productos de jardinería sin los que no podemos empezar a trabajar son los útiles para el riego, mangueras en caso de jardines o regaderas y pulverizadores para macetas. 

Cualquier experto en jardinería te aconsejará, entre los productos de jardinería imprescindibles, un mínimo de herramientas para acondicionar el suelo en los jardines exteriores: palas, rastrillos, escobas y recoge hojas… Sin embargo, aún son más importantes las que se necesitan tanto para exterior como para macetas: plantadores, incluido el modelo especial para bulbos; tijeras de podar de una mano y escarificadores manuales son los más básicos. Tampoco puedes olvidarte del abono, en cualquiera de sus variantes.


Un suelo equilibrado es el mejor aliado de un jardín ecológico


Conseguir un suelo sano debe ser la tarea esencial de cualquier propietario que quiera disfrutar de un jardín ecológico en su máximo esplendor durante cualquier época del año. No en vano, el suelo es la fuente de la que se alimentarán nuestros especímenes vegetales y de que pueden llegar sus grandes enemigos, la sequía o el exceso de agua que secarán o pudrirán las raíces, respectivamente, y con ello enfermarán nuestras plantas.

Esencialmente deberemos estar pendientes de que el suelo de nuestro jardín cuente con las características necesarias para que en él se desarrollen los microrganismos que ayudarán al crecimiento de nuestras especies de vegetales. Bacterias, lombrices, hongos… son aliados incondicionales de nuestro jardín sostenible. Para que sobrevivan en él, es imprescindible que su textura sea esponjosa, algo fácil de conseguir removiendo los primeros 20 centímetros de la superficie para airearla y contar con la colaboración de las lombrices que son excelentes para drenar el suelo.

Compost
Compost
Un magnífico truco para mejorar el nivel de nutrientes del terreno de nuestro jardín es incorporar conchas de distintos animales, ya que estas contienen una considerable proporción de minerales que se incorporarán al suelo, además de que ayudan a equilibrar el nivel de humedad.

Y, no olvides empezar cuanto antes a hacer tu propio abono. No hay mejor forma de alimentar a las plantas de tu jardín ecológico que mediante compost. Un cajón oscuro en el que vayas echando los restos de verduras y frutas, mezclados con lombrices, ceniza, arena y estiércol será suficiente para conseguirlo.

Cómo combatir con eficacia una plaga en las palmeras


palmeras
España es un país, por las condiciones climáticas de la mayor parte de su territorio, donde las palmeras ocupan un papel predominante entre las especies de cultivo en exteriores, sobre todo en la zona del Mediterráneo y las Islas Canarias. Se trata de una opción generalizada porque suelen ser plantas que no requieren de grandes atenciones y cuyo valor estético es considerable. Sin embargo, hay un serio problema si se sufre una plaga en las plantas.

Y es que, si no se coge a tiempo, una plaga en las palmeras tiene más probabilidades de acabar con la muerte del ejemplar por las propias características de estas plantas. Pensemos que su crecimiento solo es posible en un punto, el cogollo, por lo que si el insecto en cuestión ataca a esta parte esencial de la palmera, no hay nada que hacer.

picudo rojo
Picudo Rojo
Hay diferentes variedades, pero la más peligrosa plaga para las palmeras es la conocida como picudo rojo. Se trata, además de una plaga de palmeras especialmente frecuente en España, en cualquier punto del territorio. El causante es un insecto de la familia de los coleópteros que anida en la base de las hojas de las palmeras, alimentándose de ellas.

Para combatir esta dañina plaga que afecta a las palmeras la mejor solución es la prevención, la vigilancia constante sobre nuestras palmeras para detectar los síntomas lo antes posible. Es imprescindible aislar los ejemplares infectados para que no se propague la plaga que, en los casos más avanzados, no cuenta con ninguna posibilidad de cura. 

Soluciones definitivas para acabar con el problema de las malas hierbas


Si hay un problema que pone de acuerdo a todos aficionados a la jardinería, por su persistencia, ese es el del crecimiento de malas hierbas entre sus plantaciones. Además de un evidente deterioro estético de nuestro jardín, los efectos negativos de las malas hierbas son más graves, pues debilitan el desarrollo de los ejemplares que están a su alrededor, al robarles nutrientes esenciales para su alimentación.

Por eso, el tema de la eliminación de las malas hierbas debe estar entre las tareas esenciales a realizar en nuestro jardín. La solución no es fácil porque se trata de acabar con unas plantas sin dañar a las que sí queremos que crezcan en el mismo terreno.

Cobertura de plástico para evitar el crecimiento de malas hierbas
Cobertura de plástico para evitar el crecimiento de malas hierbas
La mejor respuesta frente a las malas hierbas, como en casi todos los problemas en jardinería, es la prevención. Así, cuando estamos planificando el diseño de nuestro jardín, debemos cubrir el terreno con mallas anti hierbas. Un método casero pero muy eficaz es usar plásticos oscuros, que impidan que llegue la luz necesaria al suelo para que puedan crecer las malas hierbas.

Este recubrimiento plástico debe contar con unos cortes y orificios en los que podamos introducir nuestros ejemplares y que estos sí puedan evolucionar correctamente. Para que este trabajo contra las malas hierbas presente un aspecto estético, taparemos esas mallas o plásticos con tierra, guijarros decorativos u otro tipo de acolchado que mejore el acabado de nuestro jardín. La corteza de pino es una excelente opción ya que acaba con las malas hierbas mientras protege las raíces de nuestras plantas.

Las claves del éxito de los jardines sostenibles


Jardin Sostenible
Todos los avances y tendencias en jardinería, actualmente, están enfocados a disfrutar de entornos naturales desde un profundo respeto por la Naturaleza y de una clara apuesta por el cuidado del medio ambiente. Esta es la filosofía en la que se basan los jardines ecológicos, también conocidos como jardines sostenibles.

Para que los jardines se desarrollen en todo su esplendor solo hace falta tener claros unos pocos conceptos básicos y llevarlos a la práctica. Los principios en los que siempre debemos apoyarnos son la elección de ejemplares autóctonos, tanto de vegetales como de animales y otros seres vivos, como insectos, para que trabajen de colaboración como ocurre en sus entornos naturales.

Una vez aclarado este aspecto, hay que señalar que el elemento clave de los jardines ecológicos es el suelo, que será la base del desarrollo del jardín. Por ello, el primer paso será preparar el sustrato sobre todo para conseguir que quede bien suelto, algo que contribuye al desarrollo de cualquier especie de planta.

Entre los otros trabajos imprescindibles para que el suelo de los jardine sea el correcto hay que proveerle de compost, ya que solo vamos a usar este abono orgánico para enriquecerlo. En cuanto a la superficie, lo ideal es recubrirla de hojas secas y materiales similares que ayuden a que el terreno conserve la humedad y textura adecuada.

También, tendremos que mantener el terreno de los jardines sostenibles constantemente libre de malezas y otros elementos que atraen a las plagas que pueden dañar a nuestras plantas.

Transformar jardines tradicionales en jardines ecológicos


jardin ecologico
Disfrutar de un espacio verde propio no tiene porqué estar reñido con apostar por la sostenibilidad. De hecho, la tendencia de los jardines ecológicos es fácilmente trasladable a nuestro jardín tradicional, sin necesidad de grandes inversiones.

Al hablar de jardines ecológicos, lo hacemos de entornos naturales que priman el desarrollo de la biodiversidad. Esta explicación que parece compleja, solo quiere decir que, en estos jardines, sus propietarios se aprovechan de los mecanismos que utiliza la propia naturaleza para sobrevivir.

Hay que romper con los prejuicios estéticos que solo valoran los jardines con explanadas de césped recién cortado, agrupaciones de plantas en las que solo se tiene en cuenta su aspecto armónico y árboles y arbustos tallados en caprichosas formas. Con los jardines ecológicos aprendemos a disfrutar de las diferentes especies vegetales y sus peculiaridades.

Pero, además, conseguimos abaratar considerablemente los costes de mantenimiento, ahorrando en consumo de agua y en gasto en productos químicos  como fertilizantes, plaguicidas y similares. Porque, solo plantaremos ejemplares autóctonos y fomentaremos la intervención de insectos y especies vegetales que contribuyen a la desaparición de las temidas plagas en nuestras plantas.

Un elemento al que hay que prestar un cuidado especial en los jardines ecológicos es el suelo. Con un poco de trabajo por nuestra parte, debemos convertir el sustrato del que se surge nuestro jardín en un material rico en aportes nutrientes, aireado y con un perfecto drenaje, para que las raíces de todas las plantas se fortalezcan y contribuyan a un correcto desarrollo de la vegetación.